HISTORIA MILITAR DE ESPAÑA
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BERMUDO III (1028 - 1037)

Décimosegundo rey de León, vigesimocuarto desde Don Pelayo

Bermudo era hijo de Alfonso V y nieto de Bermudo II. Nació hacia el año 1009 ó 1010, por lo que tenía unos 17 años cuando accedió al trono. Su reinado se caracterizó por las luchas contra las aspiraciones expansionistas del reino de Navarra, que acabarían con la conquista de Castilla por parte de Navarra y, finalmente, con la primera unión de León y Castilla en la persona del rey Fernando I tras la desafortunada muerte de Bermudo en la batalla de Tamara.

La cuestión castellana

Para afianzar el condado de Castilla a la soberanía del reino de León, el rey Bermudo se casó el primer año de su reinado, 1028, con Jimena Teresa (llamada también Urraca en otros documentos), hermana del conde García Sánchez de Castilla.

Por su parte, su hermana Sancha debía casarse con el conde castellano; pero el matrimonio no pudo efectuarse, pues García fue asesinado en León por sus irreconciables enemigos, los Velas, quienes atacaron la ciudad por sorpresa el 13 de mayo de 1029.

El asesinato del conde García propició las aspiraciones expansionistas del rey Sancho III El Mayor de Navarra a expensas de la frontera con León, pues el condado de Castilla pasó a ser una posesión navarra gobernada por su hijo Fernando.

Primera invasión de Navarra (1031-1032)

Como consecuencia de un voto, el rey Sancho III El Mayor quería erigir un templo a san Antolín en el lugar que antes había ocupado Palencia, ahora desierto, y además reconstruir la ciudad, pretextando para ello que la zona pertenecía a Castilla y, por tanto, a su corona.

Bermudo III se opuso a las intenciones de Sancho y se llegó al rompimiento de hostilidades entre ambos monarcas. Bermudo estaba ocupado en Galicia sometiendo a una serie de condes que se habían sublevado contra él, por lo que no pudo impedir que el rey Sancho III penetrase en la frontera oriental del reino y se apoderase del territorio comprendido entre los rios Pisuerga y Cea.

Los leoneses lograron contener la invasión mientras Bermudo acudía en su ayuda con su ejército. No se llegó al enfrentamiento directo entre ambos ejércitos, pues se concertó una paz gracias a la intervención de prelados leoneses y navarros. Mediante ella, la hermana de Bermudo III, Sancha (aquella de debía haberse casado con el asesinado conde de Castilla) se casaría con Fernando, segundo hijo del rey de Navarra, a quien su padre cedería a su muerte el condado de Castilla convertido en reino, y con él todas las tierras conquistadas entre el Pisuerga y el Cea.

El matrimonio se celebró el 1032, y con llegó el final de las hostilidades.

Segunda invasión de Navarra (1034-1035)

A pesar de los lazos de parentesco que unían a ambos monarcas, Sancho III invadió de nuevo el reino de León y se apoderó de Astorga aprovechando que Bermudo se hallaba en Galicia luchando contra los sarracenos.

Pero Sancho III falleció poco después, en 1035, y las disensiones y discordias pronto aparecieron entre sus hijos. Bermudo III aprovechó la situación para recuperar las tierras que le habían sido arrebatadas por los navarros, entrando victorioso en León ese mismo año de 1035.

Bermudo invade Castilla (1036-1037)

Animado por sus éxitos, Bermudo penetró en Castilla con objeto de recuperar el territorio comprendido entre los rios Pisuerga y Cea, cedidos con ocasión del matrimonio de su hermana. Fernando I, ya convertido en rey de Castilla, pidió ayuda a su hermano García III de Navarra, y juntos presentaron batalla al ejército leonés en el valle del Tamarón, situado al norte de Palencia, entre los rios Carrión y Pisuerga.

A primeros de junio de 1037 ambos ejércitos se enfrentaron en la batalla de Tamara, en la que el ejército leonés fue derrotado y su rey Bermudo perdió la vida. En lo más recio de la pelea, Bermudo III buscó a Fernando I para desafiarle; pero éste y su hermano García le recibieron con la punta de sus lanzas y lograron acribillar con ellas al leonés, que cayó muerto de su caballo. Como consecuencia de la batalla, las tierras palentinas quedaron definitivamente unidas a Castilla.

El rey Bermudo tenía 27 años cuando murió. A su muerte se extinguió la rama masculina de los reyes de León, por lo que la corona pasó a su cuñado Fernando I de Castilla, casado con su hermana Sancha. Esto supuso la primera unió de León y Castilla.

Todos los cronistas están de acuerdo en decir que Bermudo III fue un príncipe bueno, piadoso, justo y benéfico, exento de los vicios de la juventud y un valiente guerrero. Con sus leyes y castigos logró reprimir las conductas licenciosas y disolutas que se habían introducido en el reino.




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