EL ARMA DE INGENIEROS




LA REAL Y MILITAR ORDEN DE SAN FERNANDO Y EL ARMA DE INGENIEROS


D. EMILIO BERNÁLDEZ Y FERNÁNDEZ-FOLGUERAS (1845 - 1876)

Brigadier de Ingenieros.

Cruz de San Fernando de 1° Clase. Concedida por el valor demostrado durante la acción del fuerte de Balanguingui (Filipinas) en 1851.

Nació en Port-Louis, Isla Mauricio, el 11 de enero de 1845. Dos Cruces de San Fernando de 1ª clase, Sencillas.

Ingresó en la Academia de Ingenieros en 1841, saliendo de Teniente en 1845. Alcanzó la categoría de Brigadier. Autor de varios libros de carácter militar y referente a los Cuerpos de Ingenieros y Artillería.

En 1846 era destinado a Filipinas, donde formaría parte de numerosas expediciones organizadas contra los piratas, demostrando en todas ellas gran valor, como en la toma del fuerte de Balanguingui, o el asalto al fuerte de Joló en 1851. En la primera de estas acciones, resultaba herido de gravedad mientras construía una batería fortificada, cercana al fuerte enemigo de "Sipac", por lo que era recompensado con la Cruz de San Fernando de 1ª Clase.

Vuelto a la Península en 1852, como consecuencia de una licencia por enfermo, pasaba, una vez restablecido como profesor de la Academia de Ingenieros durante dos años, tomando parte con posterioridad en numerosas comisiones en el extranjero.

En 1859 formaba parte del Ejército de África (Guerra de África), donde llegó a desempeñar el cargo de Comandante General de Ingenieros, al ser herido el jefe que lo desempeñaba. En esta campaña asistió activamente a numerosas acciones, en una de las cuales, agregado voluntariamente a un Escuadrón de Caballería, cargó con él, resultando muerto su caballo. Terminada la guerra, volvió a la Dirección General de Ingenieros, donde estaba antes de la campaña, y donde permaneció hasta marzo de 1862 en que era destinado como jefe del Batallón de Obreros que acababa de crearse.

A partir de 1864 fue profesor del Príncipe de Asturias (futuro Alfonso XII), hasta la Revolución de 1868, pasando a la reserva, con posterioridad, a petición propia. Al restablecerse la monarquía, volvía el ya Brigadier Bernaldez al servicio activo.

Tomó parte igualmente, ya como Brigadier, en la última guerra Carlista.

Fue autor de varios libros técnicos referentes a la Artillería, así como de otros títulos de elevado interés, como: "Reconocimientos topográficos militares", "Reseña Histórica de la Guerra al Sur de Filipinas", entre otros. Además fue un reconocido tratadista de la Fortificación moderna, reivindicando al Ingeniero español, Prósperi quien en su obra "La gran defensa" se anticipó en un tercio de siglo a Montalembert.

Murió en Madrid, el 22 de junio de 1876.




FUENTES:

  • Juan Carrillo de Albornoz. La Real y Militar Orden de San Fernando y el Arma de Ingenieros.