Ocupación de Argelés, Elna y Cornella (23 de mayo de 1793)

Tras la victoria en la batalla de Masdeu, el general Ricardos emprendió la ocupación de la plaza de Argelés para cortar las comunicaciones de Perpignan con las guarniciones francesas de las plazas de Colliure y Port-Vendres. Argelés era un pueblo grande, situado a quince minutos del mar, a caballo de la carretera de la capital a Colliure y en la cruce del camino que baja desde el castillo de Bellegarde. En esa época rodeado de una vieja muralla y un foso. Sus defensores no pasaban de los 500 voluntarios de tropa nacional, reforzados por un contingente de tropas regulares de la plaza de Colliure.

Simultáneamente, para asegurar el enlace de Argelés con el Cuartel General del general Ricardos, situado en el campamento de Boulou, se ocuparían los pueblos intermedios de Elna, que flanqueaba al castillo de Bellegarde, y Cornella.

La ocupación de Argelés se encomendó al Mariscal de Campo D. José Crespo, acompañado por el Maestre General D. Tomás Morla. Para la operación se organizó un cuerpo de 3.200 infantes, 240 caballos, 8 cañones de a ocho y de a cuatro y 2 obuses.

La ocupación de Elna y Cornellá se encomendó al Duque de Osuna, al mando de una columna de 4.300 infantes, 600 jinetes y tres brigadas de artillería.

Ambas operaciones debían ejecutarse de manera simultánea.

Ocupación de Argelés

En la madrugada del día 23 de mayo la columna del mariscal Crespo se puso en movimiento. La marcha sufrió retrasos debido a la multitud de canales, cercas y bosque que llenaba el lugar. Al llegar frente al pueblo un vigía francés situado en una torre dió la voz de alarma y el contingente de tropas regulares se retiró hacia Colliure abandonando a su suerte a los 500 voluntarios. El mariscal Crespo ordenó desplegar su columna frente a Argelés y que un destacamento persiguiera a los soldados franceses que se retiraban.

La persecución la efectuaron un escuadrón de dragones, cuatro compañías de granaderos, un contingente de tropas ligeras y 2 obuses. Los soldados en retirada trataron de hacerse fuertes en una loma detras de la cual se halla Colliure. Pero al aproximarse los españoles huyeron para ponerse al abrigo de la artillería francesa de la plaza.

Tras este mínimo incidente, el mariscal Crespo procedió a la ocupación de Argelés y desarme de los voluntarios. Las autoridades y el pueblo juraron fidelidad al rey de España, seguir la religión católica y establecer la forma de gobierno anterior a la revolución. Así mismo, se apoderó de 500 cabezas de ganado menor, 150 cerdos, 20 vacas y 6 caballos.

El general Ricardos había ordenado dejar en Argelés la mitad de la columna, pero ante la circunstancia de que la guarnición francesa de Colliure la formaba un contingente de 2.500 hombres, el Maestre General regresó al campamento de Boulou para informar del hecho al general en jefe y solicitarle que dejase en Argelés un mínimo de 4.000 hombres.

El general Ricardos modificó su primera intención y ordenó que la columna entera se quedase de guarnición en Argelés, reforzada con un escuadrón del Regimiento de Caballería de Santiago que llegó el dia 24. Mientras tanto, el teniente coronel de ingenieros D. Antonio Samper se encargó de los trabajos de fortificación del pueblo.

Dos días más tarde, el 26 de mayo, se produjo un ataque francés desde Colliure. Una columna de unos 300 soldados atacó desde las colinas, siendo rechazadas por los soldados del 1er. Regimiento de Infantería Ligera de Cataluña.

Ocupación de Elna y Cornella

A las 00:01 horas de la noche del 23 de mayo la columna del Duque de Osuna inició el movimiento. El descamento de vanguardia, al mando del Mariscal de Campo D. José Eslava se dirigió hacia Elna, mientras que el resto de la columna se dirigió hacia Cornella para apoyar la primera. Al amanecer las fuerzas del mariscal Eslava rodearon el pueblo de Elna para impedir la huida de sus habitantes, mientras que la columna del Duque de Osuna tomó posiciones frente a Cornellá y desplegó su artillería.

El Duque de Osuna entregó el mando de su columna al Mariscal de Campo D. Pedro Mendinueta y se dirigió a Elna, donde las autoridades le recibieron y juraron fidelidad al rey de España, seguir la religión católica y establecer el antiguo gobierno de antes de la revolución.

A las 22:00 horas la columna se retiró hacia el campamento de Boulou con 5.377 cabezas de ganado lanar, 170 de ganado vacuno, 14 caballos, 40 sacos de harina y cebada y 800 panes, todos ellos dispuestos por los franceses para abastecer el castillo de Bellegarde.